La iluminación natural tiene un gran efecto en todas las personas, por lo que integrarla a las instalaciones de los hospitales mejora el ambiente curativo y desempeña un papel clave en el bienestar de los pacientes, familiares, médicos y personal en general.
Luz solar en los hospitales
Diversas investigaciones han demostrado que la luz influye en nuestra salud más de lo que imaginamos, por lo que existe una clara y positiva relación entre brindar a los pacientes iluminación artificial e iluminación natural, y cuanto más tiempo pasan en la luz del sol mejor será para ellos.
La luz natural mejora la satisfacción del paciente, comodidad, estado de ánimo y la calidad de sueño.
Los rayos solares activan en nuestro reloj biológico un efecto que influye en muchos aspectos del bienestar físico y emocional, este reloj biológico está regulado por la luz y la oscuridad, esto produce que los niveles hormonales eleven y disminuyan su segregación con estos ciclos de luz, la producción de cortisol aumenta con la luz de la mañana y disminuye a lo largo del día, y los niveles de melatonina aumentan a medida que oscurece y disminuye en la mañana.
Los pacientes hospitalizados permanecen mucho tiempo en un espacio encerrado, y por lo regular no cuentan con los suficientes niveles de hormonas para ajustar su reloj biológico correctamente, es por esa razón que surgen nuevas tecnologías que apoyan la correcta iluminación en los hospitales.
Los espacios del hospital que se pueden iluminar con luz natural son las habitaciones de los pacientes, pasillos y áreas comunes donde se reúnen toda la familia, la finalidad es que se puedan proporcionar estímulos que sintonicen con el reloj biológico de cada paciente.
Con SOLATUBE se puede incluir iluminación natural en todos los espacios requeridos del hospital.
El sistema de iluminación natural SOLATUBE, captura la luz a través de un domo en el techo y la canaliza por medio de un sistema reflectante interno, el tubo se instala fácilmente sin modificaciones estructurales, ya que el tubo cabe entre las vigas.
Con este sistema es posible introducir la luz natural en cualquier sitio, tiene un máximo de 12 metros aproximadamente, dependiendo de los metros cuadrados a iluminar y el tipo de modelo que se desee instalar.
La idea de incluir luz natural en los espacios de los hospitales es poder mejorar el ambiente de curación, mientras se apoya la comodidad del paciente y el rendimiento del personal médico.